La obesidad mórbida es una
enfermedad prevalente a nivel nacional y mundial, siendo responsable de una
serie de complicaciones médicas, como la diabetes tipo II, la hiperlipidemia,
el síndrome de apnea obstructiva y algunas neoplasias.
Ciertas enfermedades
psiquiátricas son factores de riesgo de obesidad, como por ejemplo, la bulimia
y los cuadros ansiosos. A su vez, la obesidad es un factor predisponente de
trastornos psiquiátricos como la depresión.
Por este motivo no se debe
considerar la obesidad mórbida solo como una enfermedad física, sino también
mental, y asegurar un tratamiento que abarque ambos aspectos. Cuando el
tratamiento médico ha fracasado, y existen indicaciones para realizar cirugía bariátrica, se deberá tener en
cuenta una adecuada vigilancia psiquiátrica del paciente en el pre y
postoperatorio, para facilitar el éxito del tratamiento a largo plazo. El
enfoque multidisciplinario en la cirugía bariátrica es la clave para el éxito,
y de acuerdo a los datos conocidos, un psiquiatra y un psicólogo deberían estar
incorporados al equipo terapéutico.
La obesidad es una
enfermedad crónica definida como un aumento de la cantidad total de grasa
corporal. Su prevalencia se encuentra en aumento en la sociedad contemporánea,
implicando un gran impacto médico, psicológico y económico. Sus causas son
múltiples y no han podido ser totalmente clarificadas. Se han postulado
factores predisponentes tales como la pérdida de homeostasis del sistema
neuroendocrino y alteraciones de algunos genes que intervendrían en el
metabolismo, los cuales junto a la influencia de aspectos ambientales y
culturales, desencadenarían la enfermedad.
El objetivo es revisar la relación existente entre obesidad, trastornos
psiquiátricos y cirugía bariátrica; es decir cuáles son los factores psíquicos
que predisponen a la obesidad, qué trastornos psiquiátricos se derivan de ella.
Existen procedimientos quirúrgicos para tratar
la obesidad mórbida, técnicas son efectivas para
promover la pérdida de peso, así como para producir mejoras en las
complicaciones físicas.
Sea el grado
de sobrepeso del paciente, mayores serán los problemas de salud a los cuales se
verá enfrentado.
Entre las
principales complicaciones de salud que afectan a los pacientes con obesidad
mórbida se encuentran la diabetes, hipertensión arterial, depresión, artritis,
asma y apnea del sueño; así mismo, se incrementa el riesgo de padecer cáncer.